Bienvenidas Hermanas del Instituto Mater Dei
El día dos de este mes, octubre, fiesta de los Custodios, aterrizaron en España cuatro “ángeles” que vienen a unirse a otras dos hermanas que llegaron de avanzadilla el pasado 3 de junio.
Alabarán al Señor con sus vidas y tareas apostólicas, en el convento que fue de las Clarisas, aquí en Ciempozuelos; así se inicia la comunidad de hermanas del Instituto Mater Dei.
Salen de su patria, Argentina, para fundar su primera casa en España, aquí las estábamos esperando, agradecidos ahora por la bondad del Señor de haberlas traído hasta nosotros. Sabemos que mucho bien nos harán a todos.
La superiora es la Hermana Julia; la hermana que la acompañó en estos meses como pioneras en Europa es la Hermana Mª Gabriela.
Y las recién llegadas son la Hna Mª José, Hna. Mª Jimena, Hna. Mª Eugenia y Hna. Mª de la Cruz.
El Instituto Mater Dei no es una congregación de clausura sino de vida apostólica; se fundó en el año 1978, allá por tierras Argentinas en la provincia de San Luis, por la Madre Mª Jesús Becerra, que reside en la casa Madre. Están naciendo y forman ya una buena “piña” o “granada” de hermanas unidas por la caridad de la verdad. Ésta de Ciempozuelos es su primera fundación en la Madre Patria que llevó la fe a América. Nos traen sus canciones, sus sonrisas, y sobre todo, sus oraciones.
LES DAMOS, A LAS SEIS HERMANAS NUESTRAS, LA MÁS CORDIAL BIENVENIDA.
Todos aquí en Ciempozuelos las han recibido con mucho cariño; las demás Órdenes religiosas, las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, los Hermanos de la Orden de San Juan de Dios, las madres Oblatas del Santísimo Redentor, y los sacerdotes, en especial Don Antonio María Soler, párroco de Ciempozuelos y los sacerdotes Coadjutores, el padre Rafael y el padre Julián.
En estos días con el templo parroquial en obras, el convento donde van a residir las hermanas está haciendo las veces de parroquia y cada día viene más gente a las misas diarias, donde las hermanas nos ayudan a rezar con la música sacra buscando embellecer y resaltar la dignidad de la liturgia que es parte de su carisma.
BIENVENIDAS-BIENVENIDAS-BIENVENIDAS-BIENVENIDAS
